Los tipos de compliance, también conocidos como tipos de cumplimiento normativo, tienen el objetivo de implementar dentro de las empresas, programas que fomenten su actividad dentro los marcos normativos vigentes.
La verificación del cumplimiento de la normativa legal y fiscal por parte de las empresas se ha posicionado como prioridad en los últimos años. De hecho, ciertas compañías se ven exigidas a implementar un programa de compliance que cumpla la función de ser un esquema organizativo de regulación, tanto interna como externa, además de ser un mecanismo de gestión y supervisión empresarial.
Tipos de compliance
En términos generales, el cumplimiento normativo garantiza que las empresas y organizaciones, en el desempeño de su actividad, se adapten a las políticas y procedimientos vigentes tanto legal como éticamente.
Ahora bien, en lo que a la gestión respecta, es pertinente distinguir modelos de compliance genéricos (o superestructuras de compliance) y modelos específicos de compliance.
El primero parte de la norma ISO 19600, que funciona como un marco regulatorio global. Este delimita los principios y prácticas que son de cumplimiento normativo para toda empresa. Los modelos específicos de compliance parten de la necesidad de ciertas empresas de estructurar, en simultáneo, diferentes sistemas de compliance.
En estos casos, es esencial que, además, se configure un sistema transversal de compliance que regule y gestione cada uno de los tipos de compliance que integran todo este programa.
Principales modelos de compliance empresarial
– Compliance Penal: prevención de delitos que podrían acarrear consecuencias penales para la empresa en el futuro.
– Compliance Corporativo: regulación del cumplimiento de las normas éticas y códigos jurídicos de la empresa en sus diferentes sedes o sucursales.
– Compliance del medio ambiente: regulación del acatamiento, por parte de la empresa, de las normativas de resguardo y cuidado del medio ambiente.
– Compliance de la salud pública: prevención de la salud y bienestar de los trabajadores, usuarios y consumidores de la empresa.
– Compliance de prevención de riesgos laborales: este es de los cumplimientos normativos laborales más importantes. Regula que las relaciones profesionales entre empleados y representantes se ajusten al marco legal vigente.
– Compliance de mercado y clientes: abarca las medidas de protección de los consumidores en sus operaciones de compra, así como las obligaciones de la empresa respecto a estas.
– Compliance anticorrupción: previene y resuelve actividades de corrupción en la administración empresarial.
– Compliance fiscal: regula el comportamiento fiscal de las empresas y previene delitos y sus consecuentes sanciones legales.
– Compliance contra delitos tecnológicos: evaluación y prevención de riesgos, vulnerabilidades y ataques virtuales. Establece medidas de control y de cumplimiento de protección de la información digital sensible, tanto de la empresa como de sus usuarios.
– Compliance financiero: prevención del fraude de forma integral y protección de los múltiples procedimientos financieros y tributarios de la empresa.
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